Hay cosas que no se cuentan. Porque dan vergüenza, porque no tienen
importancia o porque las das por sabidas en el que te escucha. Para mí el descubrimiento de la penicilina de
este último año (y he tenido varios) ha sido la copa menstrual. Ese post será largo y extenso y estará
(cuando lo escriba) llenito de detalles, que, me consta, ya hay muchas deseando
que lo haga, pero aún no lo voy a escribir.
Os he dejado el link de la página que me instruyó en el tema y hago aquí
especial mención a mi hermana Carmen que aunque la tía ha estado usándola
durante 6 meses y se la ha regalado a sus 2 cuñadas antes que contármelo a mí, tuvo,
por fin, la decencia de colgarme el post en Facebook. Pero, bueno, como es mi hermana favorita, no
me voy a enfadar con ella. Yo me la he
comprado ya pero hasta que la use tres meses haciendo ensayo y acierto y error no
voy a escribir sobre el tema. Una es una
profesional, ¿o que os creíais?
Una cosa que no te cuentan los
conductores a los que no tenemos carnet es la alucinante sensación cuando al día siguiente de sacarte el
carnet de conducir, te montas en el coche.
Y la alucinante sensación no es que hayas aprobado (nadie que conozco
piensa que ha aprobado con conocimiento de causa. Todos creen que bajó Dios y
sopló en la oreja al examinador infundiéndole de gracia divina, y esta gracia divina les
aprobó). Ni siquiera la sensación de
acojone total y que ahora el responsable eres tú y no los pies de tu profesor
de autoescuela. No. La alucinante sensación es: Estas solo en el
coche.
Hasta ese momento nunca has
estado solo en un coche que se mueva. No vale cuando tu madre te dejaba con los
intermitentes en doble fila con la ya famosa frase
“notemuevas.sivieneunguardiadilequetumadrevuelveahora”. Hablo de 1978 cuando
las madres hacían esas cosas y a ti te creaba un estrés para toda la infancia y
una tortícolis alucinante en la búsqueda del posible guardia que viniera a
gritarte “¿¿¿¿¿PERO CÓMO ESTÁS TÚ SOLA EN UN COCHEEEEEEE??????.
Arrancas, miras dos veces por
cada uno de los 3 o 4 espejos (según los modelos de los coches. Mi madre solo tiene 2 espejos y uno torcido,
pero mi madre es única) pones el intermitente unos 12 minutos antes de que te
vayas a incorporar a la circulación y…. te incorporas. Y en ese momento te giras para decirle al de
al lado “Como mola ¿eh?” y no hay nadie al lado. Ni tampoco atrás. Entonces te das cuenta que puedes poner la
música que quieras al volumen que quieras y lo mejor de todo: Puedes cantar a
voz en grito como si estuvieras loca. Y
a nadie le importa.
Es una sensación muy
fuerte y muy especial que te dura mínimo los primeros 3 meses. Luego se diluye y luego, mucho tiempo
después, vas por la C-32 una mañana fría y lluviosa y te ves a ti misma
cantando a toda pastilla cualquier pastelada de M-80 y te dices “Soy una
pureta” y sonríes y te das cuenta que el día tiene mejor pinta que tan solo 10
minutos antes.